Lengua: Español / Inglés
Historias de Cruce
Año 2011
Aquel era su primer intento. A principios del 2011 pagó su cuota por primera vez y siguió instrucciones precisas para poder cruzar a los Estados Unidos de Norteamérica.
Tomó un autobús que lo llevó a Nuevo Laredo Tamaulipas, al bajar del autobús una camioneta vieja lo esperaba y fue trasladado a las afueras de Ciudad Mier para instalarse en lo que en un inicio parecía un hotel de paso abandonado que tenía un letrero maltrecho donde era posible leer el nombre “La Catalina”; dentro del hotel había sicarios con cuernos de chivo, inmigrantes de distintas partes de México, de Centroamérica y de Sudamérica.
Las habitaciones eran muy modestas, tenían dos camas un tanto sucias, un garrafón de agua y vasos desechables. En la mayoría de los cuartos los baños no funcionaban y aunque había un baño extra para cada cinco cuartos, los sanitarios tenían un grado de suciedad tal que era preferible buscar alguna esquina del patio trasero en caso de querer defecar, claro, nunca más allá de la barda pues uno podría ser considerado en huida y ser propenso a recibir un balazo de los francotiradores que custodiaban desde lo lejos el vetusto edificio.
En el día todo era muy lento. La Catalina en realidad era un campamento nocturno aunque en ocasiones algún sicario llamaba a gritos a todos para lograr formar a algún grupo de tres o cinco inmigrantes quienes quisieran intentar cruzar el Río Bravo.
No era común cruzar inmigrantes durante el día; durante las tres semanas que Cruz Molina (Cruziro) habitó La Catalina nunca observó que ello ocurriera más de dos veces en un día, mas la noche era completamente diferente. A partir de las once de la noche y casi de forma constante a cada hora eran solicitados grupos de tres a diez personas para cruzarlos por el río, además era posible escuchar camiones, jeeps así como otros vehículos transitando en la zona, algunos radios militares no cesaban de transmitir sus mensajes en inglés, español y hasta en Spanglish durante toda la noche hasta el amanecer y en ocasiones incluso era posible escuchar avionetas sobrevolando. Había un cuarto donde estaba una especie de centro de operaciones improvisado y en el que dos personas contestaban mensajes de textos de varios teléfonos celulares, llamadas con mensajes cifrados, el radio, y coordinaban acciones que ocurrían en algún sitio desconocido. Cotejando lo que se escuchaba desde dicho cuarto con las historias de los primeros que regresaban a La Catalina después de no haber logrado cruzar, las personas sabían si era una noche en la que las cosas iban por buen rumbo o si la Patrulla Fronteriza había logrado capturar a muchos, todo en una especia de show en vivo.
Al paso de los días esta dinámica enconaba una complicidad que eliminaba las diferencias de todos los que esperaban poder entrar al territorio norteamericano, diferencias obvias a través de los distintos acentos de español presentes.
Cruziro pagó $ 3,000.00 dólares, que a un tipo de cambio cercano a $ 14.00 pesos por dólar significaban una cifra un poco superior a los $ 40,000.00 pesos. Su pago incluía el transporte de Nuevo Laredo a La Catalina, una estancia de un mes, desayuno, comida así como tres intentos de cruce y, en caso de lograrlo, una estancia de una semana en un cuarto de algún sitio cercano a Laredo Texas. El perico y los cigarros costaban extra, aunque eran bastante baratos adquirirlos. Si Cruziro deseaba que lo trasladaran más allá del siguiente punto de revisión de la Border Patrol tendría que pagar $ 5,000.00 dólares más, lo que le proporcionaría el derecho a caminar en el desierto hasta algún lugar posterior al Checkpoint donde una Van los recogería para llevarlos a Houston Texas. En total, en el 2011 lograr regresar a Estados Unidos habría de costarle alrededor de $ 112,000.00 pesos.
Sin embargo Cruziro no utilizó ninguna de sus tres oportunidades. Después de tres semanas en el lugar nunca percibió que habrían de lograr la suficiente cantidad de personas de tal manera que sus posibilidades de cruce fueran lo suficientemente buenas.
Intentarlo solo era impensable. Cruziro recordaba aquel evento sucedido en el 2010 en San Fernando donde encontraron setenta y dos ejecutados en una fosa, de los cuales la mayoría eran inmigrantes centroamericanos que seguramente intentaban llegar a Estados Unidos, era obvio para él que dicha frontera tenía un precio que de no pagarse podía costar la vida. Y no erró, unos meses después de su frustrado intento de cruce en del 2011, en abril, otra fosa con inmigrantes que seguramente buscaban internarse en Texas fue descubierta en San Fernando, esta vez de al menos 193 cadáveres.
Año 2013
Daniel Sosa: ¿Entonces lo volviste intentar en el 2013?
Cruziro: Fuck yeah!
Daniel: ¿Cuánto te cobraron en esa ocasión?
Cruziro: Esa vez ya era tres quinientos verdes y ahora sólo incluía dos semanas; una vez adentro de EEUU serían seis bolas más, tres chances para Laredo una para Houston.
Daniel: Es decir que ya habías gastado $ 3,000.00 dólares en el 2011, y en el 2013 pagaste $ 3,500.00 dólares más y ya tenías listo $ 6,000.00 dólares más para que te internaran hasta Houston. ¡Entrar a Estados Unidos te habría costado más de $12,000.00 dólares! ¡Es decir, más de $ 175,000.00 pesos! ¿Nunca pensaste que con ese dinero podrías haber puesto un negocio y tener una mejor vida aquí en México?
Cruziro: Mira, para ti y para todos los otros mexicanitos que visitan legalmente a los gringos ir a Estados Unidos es un asunto de visita, de shopping, es un juego. ¡Yo viví allá veinte y cinco años!, tengo dos hijos en LA, no soy Cruzito, ¡soy Cruziro! Amigos, mi mamá, una que otra nalga, están allá. No espero que lo entiendas, but I’m part of it as much as I’m part of Mexico. Además una vez allá, puedo pagar cagado todas estas deudas que adquirí en México.
Daniel: Bueno y ¿qué pasó en este último cruce?
Cruziro: Esta vez lo intenté las tres veces. La tercera casi lo logro. Te llevan al río y uno trae su bolsa; te encueras, sólo quedas en calzones y en la bolsa pones tu ropa, lo que traigas y la inflas; entonces cruzas el río. Por donde cruzamos nunca nos cubrió el agua más allá del cuello, pero el pinche río te jala, yo tuve que aventarme por un pendejo que cayó en lo profundo y lo sacamos. Ya en el lado americano te vistes en chinga y el coyote te dice por dónde caminar. Íbamos bien, hasta que vimos una camioneta de la Border Patrol, en chinga nos acostamos debajo de unos matorrales y el coyote se culeó; nos dijo que camináramos hacia una loma y que él estaría en otra lomilla que estaba atrás asegurándose de que la migra no fuera en nuestra dirección, que nos levantaría la mano con el celular si veía que iban hacia allá y teníamos que correr en putiza hacia donde sea y que mientras él se aseguraba de eso debíamos esperarlo acostados en algún matorral de la loma donde nos envió. Llegamos a la loma como a las tres de la madrugada, podíamos observarlo desde allí, estaba acostado viendo hacia donde estaba la Migra y allí estuvimos hasta que amaneció. Cuando amaneció ya no lo miramos, pensamos que nos alcanzaría, lo esperamos como una hora más, y después decidimos caminar. No pasaron ni treinta minutos y tres camionetas de la Migra nos rodearon, nos preguntaron si alguien hablaba inglés, les contesté que yo, nos preguntaron por nuestros papeles, yo traduje, y nos metieron a las camionetas. Nos llevaron a un centro de control, tomaron huellas y fotos, después un camión pasó por nosotros y otros que estaban en el lugar nos llevaron a la frontera y nos escoltaron hasta la mitad del puente y nos soltaron del lado mexicano.
Daniel: Pero, ¿cómo sabían exactamente dónde estaban? ¿Tú crees que el coyote los traicionó?
Cruziro: ¡Nombre, no seas pendejo! Esos culeros sabían dónde estábamos desde la noche. Yo creo que el coyote también sabía que ya estábamos fucked up y nos dejó allí como carnada para que el culero pudiera escaparse. Yo creo que algún dron ya nos tenía identificados desde que estuvimos acostados por cuatro horas como pendejos en la pinche lomita, ¿para qué capturarnos si ya nos habían visto? Esas madres tienen infrarrojo, visión nocturna y mamada y media. ¿Para qué capturarnos si nos tenían bien identificados, tranquilitos y sentados como pendejos en un lugar bien quietecitos? Think! Mejor capturar a todos los otros que andan buscando en la noche, a nosotros fácilmente nos recogían al siguiente día y ya con la luz del día.
Daniel: ¿Y cuál es el trato de la Border Patrol cuando te capturan?
Cruziro: ¡Aaa noooo, ellos son a toda madre!
Daniel: No, Cruziro, ¿en serio?
Cruziro: En serio man!, y más si hablas inglés. No mames, son puro González, Martínez, Guzmán, y uno que otro que sí es gringo. ¡Algunos de esos weyes son más mexicanos que yo! Para mí ellos son como yo, con la única diferencia es que ellos nacieron allá, Lucky bastards! Mira, y yo llegué a Estados Unidos a los tres años, ni ellos ni yo nos acordamos cuando aprendimos inglés y algunos, tampoco cuando aprendieron español. En cuanto a su trabajo, pues es su jale, y al final todo es un juego; ya no cruzaste, ya te capturaron, ya te chingaron, ¿para qué tratarte mal?, se desesperan con los puñetas que no entienden inglés y no entienden lo que les piden que hagan, pero hasta yo me emputo por eso. Ellos hacen su jale, y la verdad les tengo menos miedo que a los que tengo que tratar del lado mexicano. ¿O qué ya no te acuerdas de las fosas de cadáveres en San Fernando?, eso está más culero ¿no crees?
Daniel: ¿Volverías intentarlo Cruziro?
Cruziro: Pues mira, ahorita debo un chingo, y la frontera está bien peligrosa, y mientras más culera esté, más caro es cruzar. Así que por ahora estaré trabajando para por lo menos pagar la mitad de lo que debo, y ya después veremos qué pasa.
Daniel: Además, como dijo el Quijote: “Una golondrina no hace verano”, probablemente en el próximo intento lo logres.
Cruziro: Pues yo no sé de tu fucking Quijoto, pero Supermán dijo: “los sueños nos salvan. I’ll fight!” y yo no puedo dejar de soñar que vea a mi hijo graduado de High School. Aún me quedan algunos años para intentarlo.
* Los nombres reales de las personas y lugares involucrados en la historia han sido cambiados para protección y seguridad de los testigos que han compartido información.
Border’s Stories
He took a bus from Monterrey to Nuevo Laredo Tamaulipas where an old truck was waiting for him to take him to some place close to Mier Tamaulipas. He arrived to what at first glance looked like a trashy abandoned motel which had a half destroyed sign with the name “La Catalina”. Inside that place a small group of armed assassins, sicarios, holding AK-47 rifles all of them.
La Catalina was as ugly outside as it was inside. Small rooms with two beds, some water and disposable cups were full of immigrants from all Latin America, all of them waiting for the right moment to get into The United States of America while, in the meantime, were dealing with dirty rooms and a nasty place.
During daytime all was very slow whilst night was very busy instead. After 11pm 3 to 10 immigrants groups were called almost hourly, headed to the river to finally get them into The US; Trucks, jeeps, military radios transmitting English, Spanish and Spanglish voices as well as small planes low flying the area were also easily heard. An small room improvised as a sort of operation’s center from where two guys were texting back messages from a bunch of cell phones, answering radio communications, and coordinating on field actions was the source to know if the ones trying to get into the US were having success or not, source which was complemented with those stories from those who couldn’t do it and returned back to La Catalina, what at the end built a sense of complicity among all the immigrants who were waiting the right time to try to get them into Texas.
Cruziro paid $ 3,000.00 dollars, which at that time was a little bit more than $ 40,000.00 Mexican pesos, to be one of those immigrants who were waiting at La Catalina coyotes in order to be introduced into The US by that place’s coyotes; his payment included his Nuevo Laredo-La Catalina transportation, to be allowed to live at La Catalina for a month, breakfast, lunch and three attempts to get him into The US and, in case that achieved, he would be allowed to stay one week more in an small room located somewhere close to Laredo Texas; cigarettes and drugs were not included by the fee but they were very cheap and reliable inside the old motel. Once in The United States he will need to decide whether he wanted to be taken through the desert beyond the last Border Patrol checkpoint and then transported by a van to Houston or not, but that will cost him $ 5,000.00 dollars more. As a whole, returning back to The United States was going to cost him $ 8,000.00 dollars, and that without considering his Houston-Los Angeles transportation since he was actually raised in California and didn’t have any place or contact to stay in Houston.
At the end Cruziro didn’t use any of the three shoots he had to get into American soil because after three weeks of closely following what was happening in La Catalina, he never felt that he had chance enough to be successful based on his roomies’ results.
Trying to get there by himself was unthinkable, and more after experiencing all the logistic displayed by those coyotes he hired. Since the very first time he arrived to La Catalina and saw those armed guys he recalled many times that story of 72 immigrant’s massacred some miles away, in San Fernando, but in the same Mexican State where he was now. Something was very obvious for him, the border had a price and if not paid it might cost the life. Cruziro was right on not trying to do it by himself, a couple of months after his frustrated attempt to illegally cross the border, on April 2011, 193 immigrant bodies who were brutally killed and buried were found again in San Fernando Tamaulipas, it was almost certain they were trying to get The US.
Year 2013
Daniel Sosa: …So, you tried to do it again on 2013?
Cruziro: A huevo!
Daniel: How much did they charge you then?
Cruziro: This time it was three and a half grands. It included two weeks instead; once in The US I was supposed to pay six grands more, you know, for they to take me from Laredo to Houston, ohh, and I had three shoots too, just as before.
Daniel: Hold on!, this means that you had spent $ 6,500.00 dollars until then, including your 2011 attempt and the 2013 one, and you were up and ready to pay $ 6,000.00 dollars extra to made them take you from Laredo to Houston!, $ 12,500.00 dollars total! Right? Didn’t you consider that with such amount of money you could’ve been capable to set an small company up and being able to get you a better life in Mexico?
Cruziro: Dude, for you and all of those “Pedros” who have the chance of legally visit The US, to go there is a matter of fun; shopping, practicing their god dammed English learned in their god dammed expensive English schools, who doesn’t want to chill with Mickey Mouse right uh?, for me it has and it is quite different Bro, I lived t-w-e-n-t-y f-i-v-e years there! I have two kids who live in LA!, friends, cousins, my mom, even my fucking ex-wife!, and God knows I couldn’t care less about that bitch, but even she lives there! look, I don’t expect you to understand it, but yo soy tanto de México como soy del Gabacho!, I’m not CruziTo, as you call me you motherfucker, I’m CruziRo! Besides, once there, it was going to be very easy to pay back all the debts I took to get me in The States.
Daniel: Ok, got it. Now tell me, what happened?
Cruziro: This last time I took my three shots. Two of them were very quick, I noticed we were going to be caught and I went back to the river and saw how they were fucked up from the Mexican side. The third time seemed highly probable; during that night many did it, so I tried. When you get to the river you have a bag, you take all you clothes out, put them in it, inflate the bag and star walking in the river; the water was never high enough to made us swim, but you needed to be careful, the current was tough and could pull you out to the deeper side of it! Once I got Texas, I dressed myself up as hell, and our coyote told us where to walk. All was ok until we saw a Migra’s truck lights far away from us, we immediately laid down next to some bushes, the coyote told us to walk straight until we get an small hill that was like a mile away from where we were while he was supposed to be following the Border Patrol, you know to make sure Five O were not heading themselves to the route we were going to take; we got there and we could actually see him while he was using his radio and watching towards where The Migra was, it was around 3am. We waited until the sunrise, and then we waited one hour more for our coyote to join us, and he never came back; therefore we decided to walk without him and in less than thirty minutes after we started we were intercepted by three vans ready to capture us. They asked us if someone was an English speaker, I told them I was, and I translated all the instructions they were giving us. They took us to a kind of control center, took our fingerprints, some pics, and after some time we and others who were already there were taken to a big bus to be left at the international bridge where we were escorted to the half of it and released in the Mexican side.
Daniel: How did they know where you guys were? Do you think your coyote betrayed you?
Cruziro: Hell no! Those motherfuckers knew where we were all the time! I mean, maybe since the first time we saw their truck!, I think our motherfucker Coyote knew that too! We were the bait, the bait he needed to escape. That’s why he told us to go and wait for him, he was getting him ready to go. There are drones flying all over that area you know, those fucking things have infrared, night vision, and God know what else, if we were there, quiet, not even moving, why should they go ad pick us up? Think man! Wasn’t not better to pay attention to those who were more, or on their way and actually moving; I’m telling you fool, the entire world is trying to get Texas at night!, The Border Patrol waited until light time and once we walked they sent for us, but they knew where we were all that night.
Daniel: And how did they treat you when they caught you?
Cruziro: They are cool, Bro!
Daniel: C’mon Cruziro, I’m serious.
Cruziro: I’m serious dude!, and more if you speak English. C’mon those agents are named Gonzalez, Martinez, Guzman, they are not gringos, there are few who are real gringos though! Some of those motherfuckers are more Mexicans than me! For me, they are like me, with the only difference that they were born there. Look, I arrived to the States for the first time when I was three years old, neither them nor me remember how we learned to speak English or even Spanish, pinches suertudos, eso es lo único que son. They don’t treat you bad though, what would they win by doing it? They already fucked you up, they got you. They’re just doing their job. They get desperate with those dumb assholes who doesn’t understand English, cuz they can’t follow their instructions, but what?, even I would be mad dealing with them!, and to be honest with you I’m more scared with those ones I had to deal with on the Mexican side, or didn’t you know about those poor fellows who were slaughtered in San Fernando the same year when I tried it! More than 150 poor motherfuckers who were just trying to get The US, and our fucking government don’t give a shit! I think that’s worse.
Daniel: Would you try it again Cruziro?
Cruziro: Well, I owe a lot of money now, the border’s been dangerous lately and the wilder the border the more expensive those types of services will be, hence I think I will be working hard in the Mexican’s hood for a while, I want to reduce at least half of my debt anyway, and then we will see.
Daniel: And besides, as Quijote said, “one swallow does not make a summer”, perhaps you will make it next time.
Cruziro: Well, I don’t know about your dammed Fagjote, but Superman once said: “dreams save us. Pelearé!, and I won’t stop thinking on seeing my kid graduating from High School. I still have a bunch of years to try it again.
* Real names of persons and places were changed in order to protect our sources security.
Para citar este texto:
Sosa, Daniel. «Quixote v/s Supermán VIII: Cruz, ando, ríos. Historias de Cruce / On their way back. Border’s Stories» en Revista Sinfín, no. 19, septiembre-octubre, México, 2016, 12-21pp. ISSN: 2395-9428: https://www.revistasinfin.com/revista/ |
Daniel Sosa
Consultor empresarial con más de cinco años de experiencia en soluciones de negocios en México y Estados Unidos.