Juego de dioses y otros poemas

Juego de dioses

El universo nació
el día en que los dioses se conocieron
entre los juegos de medianoche
mientras inventaban la matatena.

La palabra tierra es una réplica
en escala de estornudos
montículo de dioses
que juegan con canicas
un día cualquiera.

La tierra se construyó
entre juegos y pellizcos
el día en que los dioses
pelearon en un partido de futbolito.

Ambos lados

Estamos solos,
vivimos en la sombra de la lengua,
mi mano derecha finge
que escribe con la izquierda,
se viste de distintos nombres.

Lo mejor es hacer polvo los huesos,
para que mis manos
no sostengan ningún rostro,
porque el recato extiende sábanas
en distintas camas.

Pasaje sin vuelta

Mis libros tienen habitantes
pasajeros sin boleto,
de nombres ocultos
entre abrigos,
cubrebocas y lentes.

Mientras hablan
hay vigías a un metro de distancia,
cumpliendo las medidas de salud.

Son extranjeros
se proclaman en lenguas
para inaugurar este fin del mundo.

Flores de noche

Sembré una gladiola con tu nombre
para jugar a ser dios
avisar que has llegado
envuelta en tierra
pero con el aroma de una flor.

Hoy es una noche fría
finjo que llueven meteoritos
para no verte.

Dejaré que florezcas
tibia
    sola
tuya
    al final
esa flor tiene tu nombre.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *