Una playa sobre la luna

Para Chiara

I

Los azules del agua se proyectan sobre tu rostro
corres para sumergirte entre las olas
una marea incansable envuelve tu cuerpo
eres el agua y la luna.
Tus lágrimas están hechas del mar
de todos los amores perdidos del mundo.
Cuando lloramos nuestras lágrimas
mantienen el oleaje en la luna.
Lo descubrí en sueños,
como descubrí tu existencia.

II

Tu mano se entrelaza con la mía
sentados en la playa
me hundo en tus ojos y su reflejo.
¡Si tan sólo un instante pudiera ser eterno!
Después, el silencio, la calma.

III

Tu cabello corto y claro dirige el ritmo del viento
tus palabras moldean el rumbo del agua.
El sol ha dejado de abrirse paso entre el mar
para que las luciérnagas por fin puedan arder.
Tu rosto es intermitente en la noche
como si al parpadear desapareciera
y lo estuviera imaginando con todas sus características.
Quizás como un recuerdo
como una ilusión
o un ensueño.

IV

Somos niños despreocupados jugando
en una noche que no termina
y un día que no llega.
9,824 kilómetros ahora
no representan nada.

V

El mundo nos ha partido a golpes
por eso nos refugiamos en el amor
por eso soñamos con las estrellas
por eso amamos
así, con la espalda rota y el alma destrozada.

VI

El perfume de los naranjos
impregna tu olfato
me describes las naranjas y sus hojas
tomas una, la partes en dos
me das una mitad.
Miramos al vacío porque
ahí todo parece tener sentido.

VII

Dibujas sobre la arena
y en esos dibujos puedo ver que
nunca más habrá maldad en el mundo.
Me dices algo al oído que no entiendo.
Lo repites y tu aliento acaricia mi piel oscura.
Todo va a estar bien, eso te prometí el domingo pasado.
Me besas.
Te beso.
Ahora son las estrellas las que nos miran
y nos escriben poemas de amor durante la noche.

Pintura de Marcelino Llopar

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